LOS GLADIADORES cerraron su participación en el Domingo Bárcenas con un excelente triunfo ante Túnez por 25 a 23

Con Diego Simonet como central durante la mayor parte del partido, el elenco de Dady Gallardo hizo un primer tiempo con puntos altos en el comienzo y en el cierre del capítulo. Nos fuimos al entretiempo 13-12, ante un rival que en los próxmos días peleará por la supremacía en Africa para acceder a los Juegos de Londres. Un país al que Argentina aún no había podido ganarle y al que empezó a doblegar desde el acierto del técnico argentino para pasar a marcar 5+1.

El complemento fue sumamente equilibrado y Argentina recién sacó dos goles de ventaja a falta de dos minutos. Con una brillante presentación de Guido Ricobelli en la mayor, con un Matías Schulz que gravitó menos que ayer pero que sumó pelotas de peso y un Diego Simonet que a pesar de ser tomado en personal se las rebuscó para sacar el brazo en momentos calientes.

Un símbolo de estos tiempos de la Selección Argentina fue el gol de Fly que Diego le sirvió a Fede Pizarro, seguramente sin coordinación previa y producto de la lectura del juego, como ocurriera contra Alemania en el Mundial de Suecia. Es decir, ante situaciones apremiantes, esta Selección apela a recursos que le dan sorpresa en lugar de lanzar forzado sobre un doble blocaje.

Bien por Los Gladiadores, que se recuperaron de la goleada ante España y que derrotaron a un equipo sólido y serio a nivel internacional.

Ahora vendrán los amistosos en Galicia, pero lo más trascendente de esta gira en materia competitiva ha concluído y nos deja una buena imagen por este triunfo muy valorable.

LA DERROTA ANTE ESPAÑA

Los Gladiadores cayeron ante la Roja por 34-16 en su primera presentación de 2012, en el marco del Torneo Domingo Bárcenas en las Islas Canarias.

El equipo nacional tuvo un primer tiempo con tres caras para irse al descanso 7-13: clase mundial en el arco, defensa con momentos de alta intensidad y un ataque con muchas imprecisiones, que le dio con facilidad a los de Valero Rivera lo que les costaba en el posicional.

El complemento mostró un pico de rendimiento de Argentina, que se puso a sólo 4 goles a los 5 minutos. Pero nuevamente por la pérdida recurrente de balones sufrimos una ráfaga roja que nos sacó del partido. La diferencia se estiró a 10 tantos y a las dudas en ataque le sumamos el apuro por limar una brecha indescontable.

Vale destacar que Dady Gallardo le dio minutos en cancha a las nuevas caras de la albiceleste como Lucas Moras y Adrián Portela, además del reingreso de Maxi Ferro, que entró derecho en la definición. Estuvo ausente Federico Vieyra que tenía un viaje programado con la familia y que se sumará en la segunda etapa de la gira.

Mañana será el turno de enfrentar a Túnez, a priori un rival con mayores equivalencias en el que tendremos las oportunidades que no nos brindó a una selección española que ostenta el bronce del Mundial de Suecia y que perfila como uno de los candidatos para el Europeo de Serbia.